A medida que fue avanzando el tiempo, y los logros de la industrialización eran más que palpables, los problemas ambientales y los recursos naturales pusieron restricciones a dicho crecimiento. El agotamiento de los recursos naturales no renovables implicó un cambio importante en los modelos económicos de los países, que implicaba un análisis de la senda óptima del consumo y la inversión, en un sentido sostenido.
En 1931, Harold Hotelling con su trabajo “The economics of exhaustible resources” analiza por primera vez de una manera formal el problema del agotamiento de los recursos naturales. Consideraba que los recursos naturales estaban siendo explotados de manera muy egoísta y a una tasa muy rápida, en desmedro de las generaciones futuras.
La prohibición de la producción en ciertos momentos y ciertas regiones eran totalmente ineficientes y generaba, junto con el poder monopólico, una distorsión de los niveles de producción óptimos; de ésta manera, si la oferta total no era reservada para nuestros remotos descendientes, y que existe una tasa óptima de producción actual, la tendencia de los monopolios y oligopolios será mantener la producción por debajo de la tasa óptima para exigir precios excesivos a los consumidores.
Y aquellos que sostienen que las prohibiciones absolutas son mejores que los impuestos, regalías o la regulación, pueden ser consideradas como interesados en mantener los precios altos. Aquellos, que son motivados por intereses personales en desmedro de una nación y las futuras generaciones.
De ésta manera Hotelling sostenida que el valor de los recursos naturales no renovables debería incluir una renta por su agotamiento, y que dicha renta debería crecer de manera proporcional a una tasa de descuento, con el fin de maximizar el valor presente de los recursos naturales no renovables durante el periodo de extracción.
La porción del ingreso proveniente de los recursos naturales debería ser invertida para compensar el agotamiento del stock de capital natural; dicha porción de ingresos de denomina renta Hotelling, la cual es equivalente a la diferencia del precios del recurso menos su costo marginal de extracción multiplicado por el nivel de extracción del recursos.
Por lo mencionado se motiva la aplicación de la Regalía o Royalty a la minería; de ésta manera, las empresas mineras deberían considerar, además de los costos de producción, los costos provenientes de la renta hotelling.